Por Gabriela Murgueytio – 8 de marzo de 2023
La conmemoración del día Internacional de la Mujer devela que en Ecuador las desigualdades en derechos entre hombres y mujeres se mantienen. De acuerdo a cifras oficiales de ONU Mujeres, revelan que las brechas de igualdad de género continúan. En el país las mujeres ganan 16% menos que los hombres en cargos iguales o similares.
En el panel “Cara y Cruz”, realizado en Sonorama, Ana Elena Badillo, representante de ONU Mujeres en Ecuador indicó que, pese a que el país ha avanzado en materia jurídica para favorecer el cumplimiento de los derechos de las mujeres con la promulgación de leyes, todavía falta mucho por hacer para que esos cuerpos legales sean aplicados en la práctica.
Las mujeres siguen estando rezagadas en el acceso a la actividad económica formal y el desempleo sigue siendo superior en mujeres, dice Badillo.
Verónica Artola, exgerente del Banco Central y decana de la facultad de economía de la Universidad Católica señala que la situación económica de las mujeres a escala mundial, lejos de mejorar ha ido en retroceso, es así que para que los derechos de las mujeres si igualen al de los hombres tendrían que pasar 132 años. En el caso de Ecuador, las mujeres enfrentan mayores niveles de pobreza que los hombres, y esto se duplica en las zonas rurales del país.
Las mujeres a pesar de ser cabezas de hogar, no pueden acceder a crédito del sistema financiero en igualdad de condiciones que los hombres, denuncia Artola.
En Ecuador, las mujeres solo por su condición de ser mujeres tienen 12% menos de probabilidad de acceder a un crédito.
Otro factor de exclusión que tienen que afrontar las mujeres en Ecuador es el del acceso a la tecnología, dice Badillo lo que las convierte en analfabetas tecnológicas.
Esto lo viven de cerca las mujeres de la ruralidad asegura Zenaida Yasacama, vicepresidenta de la Conaie, así como el hecho de que a los varones dirigentes les ha costado comprender que las mujeres sí pueden asumir roles de lideresas y de trabajadores a la par de que cuidan de sus hogares y de sus hijos.