Por Gabriela Murgueytio – 02 de noviembre de 2022
La situación de violencia e inseguridad al presidente de la República Guillermo Lasso y a su gobierno se le salió de las manos y s ele volvió inmanejable, sostienen legisladores en la Asamblea Nacional, razón por la cual, consideran que la declaratoria del estado de excepción y del toque de queda en Guayas y Esmeraldas son medidas insuficientes para detener el terrorismo delictivo.
Yeseña Guamaní, asambleísta de la Izquierda Democrática sostiene que ante la guerra desatada por las bandas criminales en contra del Estado ecuatoriano, el Presidente Lasso debe inmediatamente declarar en emergencia la seguridad en todo el territorio nacional.
Esto permitiría contar con una política pública de seguridad en la que estén delineadas las estrategias y también contar con los recursos necesarios para que la fuerza pública realice su trabajo, dice Guamaní.
Finalmente, Guamaní exhortó al jefe de Estado a convocar, de manera urgente, una sesión del Consejo de Seguridad Pública y del Estado (COSEPE), para con las autoridades de las diferentes funciones del Estado encontrar una salida en conjunto a la crisis de seguridad.
Mientras tanto, hay otras voces al interior de la Asamblea Nacional, que preparan la activación del Art. 130 de la Constitución, mecanismo de muerte cruzada para destituir al Presidente Guillermo Lasso “por grave crisis política y conmoción interna”.
La muerte cruzada es inminente”, dice el asambleísta y jefe de bloque de Pachakutik, Salvador Quishpe, tras criticar que el Gobierno y su “incapacidad para resolver los problemas de inseguridad” del país.
